SALMOS: ACRÓSTICOS:
SALMOS: ACRÓSTICOS:
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
Ayuda Pastoral:
Introducción:
En la forma común de los acrósticos
que se encuentran en la poesía del AT., cada línea o verso empieza con
una letra del alfabeto heb., en orden.
Cada
letra puede dar comienzo a una línea (Salmo 111, 112), medio verso (Salmo 25,
34, 145), un verso entero (Salmo 37; Prov. 31:10-31; Lamentaciones 1, 2, 4) o
tres versos (Lamentaciones 3).
El
Salmo 119 es la demostración más trabajada del método acróstico donde, en cada sección de
ocho versos, se usa la misma letra para comenzar, y las 22 secciones del Salmo
van avanzando por el alfabeto heb., letra tras letra.
La poesía hebrea permite que las demandas del sentido tengan precedencia sobre las demandas de forma, por lo que hay acrósticos cortados (falta una letra en cada uno de los Salmos 25 y 34) o acrósticos en que las letras están fuera de orden (Lam. 2:16-17).
Salmos
alfabéticos o acrósticos. Las letras iniciales de los versos de los
Salmos 9, 10, 25, 34, 37, 111, 112, 119, 145 tienen en el texto hebreo una
sucesión alfabética. Los nombres de estas letras iniciales se mantienen en
algunas versiones. En la RVR encontramos los nombres de estas letras al
comienzo de cada estrofa del Salmo 119. Los salmos acrósticos son de tres
clases:
1. En unos, la primera letra de cada verso está en orden
alfabético (Salmos 25, 34, 111, 112, 145; con unas pocas excepciones menores en Salmos 25 y 34).
2. En otros, las letras del alfabeto dan comienzo a versos
alternados (Salmo 37) o están al principio de versos que se
hallan a intervalos más amplios (Salmos 9 y 10).
3. El Salmo 119 se divide en 22 estrofas de 8 versos cada una, y cada línea de cada estrofa comienza con una misma letra del alfabeto. Las estrofas están precedidas alfabéticamente por las 22 letras hebreas.
El acróstico se usaba, sin duda, para
ayudar a memorizar, lo cual se anticipó a nuestros abecedarios en más de 2,000
años. Por regla general, no se usan los salmos
acrósticos
para mostrar el desarrollo de un tema, sino para hacer repeticiones con
palabras diferentes e ilustraciones variadas. Estilísticamente se caracterizan
por la riqueza de expresión.
Ayuda Hermenéutica:
Acróstico:
gr., akrostichis,
de akros = más
alto, y stichos = una línea de poesía.
¿Cuáles son los salmos Alfabéticos o acrósticos?
Los Salmos alfabéticos se llaman así porque sus versos sucesivos, o series paralelas sucesivas, comienzan
con las 22 letras del alfabeto sucesivamente. Algunas de estas formaciones son
perfectamente regulares, otras son más o menos defectivas.
Por ejemplo:
Acrósticos: 9, 10, 25, 34, 37, 111, 112, 119, y 145.
Los Salmos son poemas parcialmente alfabéticos, cada dos, tres o cuatro
versículos empieza con otra letra del
alfabeto heb., pero varias
letras son omitidas: |
|
1. א – Alef
- (1)
|
30.
ל - Lámed - (12) |
2. ב – Bet - (2)
|
40.
ם - Mem - (13) |
3. ג - Guímel - (3)
|
50.
נ ן – Nun - (14) |
4. ד - Dálet - (4)
|
60.
ס – Sámej - (15) |
5. ה – Hei - (5)
|
70.
ע – Ayin - (16) |
6. ו - Vav - (6)
|
80.
פ – Pe - (17) |
7. ז - Záyin - (7)
|
90.
צ ץ – Tsáde - (18) |
8. ח – Jet - (8)
|
100.
ק – Qof - (19) |
9. ט - Tet - (9)
|
200. ר - Resh - (20)
|
10. י – Yod
- (10) |
300.
שׁ
שׂ - Shin,
Sin*- (21) |
20. כ ך - Kaf - (11)
|
400.
ת - Tav
- (22) |
Se ha agregado los
valores de cada letra que empiezan del 1 hasta 400, que son los valores
numerales del abecedario hebreo, que son 22 consonantes, *Shin y Sin, se considera una sola consonante. |
¿Qué es un acróstico en la Biblia?
La acróstica hebrea se refiere al estilo de texto poético en el cual cada línea o cada serie de líneas comienza con una letra del abecedario hebreo en forma sucesiva desde la alef = א (primera letra) hasta la tav = ת (última letra). Véase la tabla arriba.
Ejemplo: Salmo 119. El Abc de Oro de la Palabra de Dios:
Este, el ejemplo más grande del arte del Salmo alfabético (acróstico)
(ver La poesía en la Biblia), tiene un tema digno de su
habilidad. No sabemos cuándo fue compuesto y, por lo tanto, no podemos decir a
cuánto material escrito se refiere cuando habla de la palabra del Señor, o sus
mandatos, preceptos y promesas.
Nuestro es el privilegio de cantar estas palabras en un día cuando
contamos con toda la Escritura escrita; del salmista fue el privilegio celebrar
la realidad fundamental de que, venga como viniera y en qué forma exista, la
palabra de Dios es central a la vida del pueblo de Dios. Nuestro Dios es un
Dios que habla y es la posesión de esa revelación verbal lo que diferencia a su
pueblo de todos los demás sobre la tierra.
Acrósticos: 9, 10, 25, 34, 37, 111, 112, 119, y 145.
Estudiaremos durante varias semanas, los nueves mencionados:
Comentarios
Publicar un comentario